Empresas buscan formar talentos salteños en el mundo tecnológico

Desde hace seis años los creadores de Silentium Apps trabajan para formar talentos salteños que se sumen a su empresa como desarrolladores de soluciones mediante la tecnología para clientes de Salta, del país y del mundo.
Esta semana estuvieron presentes en el evento 4YFN (4 Years From Now; “dentro de cuatro años”, en inglés), en el marco del Mobile World Congress 2022, en Barcelona (España), invitados por la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional.

Ellos representaron a una de las 15 empresas argentinas que fueron al encuentro y una de las cinco que expusieron. Hablaron sobre uno de los proyectos que llevan adelante en el área de ciencia de datos, en un 100 por ciento con equipo propio.

Con trabajo y experiencia consolidada y con la intención de convertirse en referentes del rubro en Latinoamérica, desde Silentium Apps buscan generar mayor interés por el desarrollo del software en Salta, para que más personas se sumen a este rubro, que tiene tanta demanda y genera muchos ingresos, sobre todo de divisas extranjeras. Apelan a los tomadores de decisión para que inviertan en la formación de jóvenes en estos temas.

En 2016, Francisco Valdez, Martín Valdez y Santiago Jerez -todos ingenieros en sistemas- decidieron armar una empresa de software en Salta. Si bien antes tuvieron empresas en otros lugares, esta vez eligieron asentarse en su provincia de origen, con la idea y el compromiso de formar talentos locales. 
Hoy tienen 62 empleados -la mayoría salteños, y varios, tucumanos y jujeños- y desde el NOA desarrollan tecnología de punta para clientes en distintos países del mundo.

Desde Silentium Apps ofrecen un programa a jóvenes salteños para que se formen en software y/o diseño mientras integran los equipos de trabajo de la empresa. 
“Iniciá tu carrera” es un esquema mediante el cual ellos asumen la responsabilidad de formar a los chicos e incorporarlos a su nómina.

Luego de una serie de entrevistas, en las cuales evalúan sobre todo las capacidades “blandas”, como la proactividad y el interés por aprender sobre estos temas, los que ingresan inician su carrera dentro de la     empresa.

De acuerdo con los conocimientos previos, los aspirantes comienzan una etapa de formación con proyectos de prueba para luego pasar a proyectos reales, y con la perspectiva de convertirse en “junior”. Si tienen una base de formación y experiencia en programación, ingresan directo a puestos remunerados.
“Tratamos de ‘evangelizar’ sobre este hermoso mundo de la tecnología. Queremos que se acerquen a aprender a programar”, manifestó Francisco.

Mediante un convenio que tienen con la Universidad Católica de Salta, muchos estudiantes que están en los últimos años de fomación académica y quieren programar en sistemas realizan prácticas en la empresa. “Nosotros buscamos la inserción rápida de los chicos en el mundo laboral porque todo es muy veloz...”, explicó el experto. 

El empresario consideró que “Salta es un diamante en bruto” y que tiene mucho potencial: “Nosotros buscamos federalizar la industria del software. Salta puede sobresalir como polo tecnológico, así como lo hacen Córdoba y Mendoza”. Observó que para lograr esto hace falta más apoyo de los gobiernos.
 Aseguró que hay muchísimo trabajo en software, que está muy bien remunerado y que es muy agradable hacerlo: “En nuestro rubro el recurso humano es lo más importante. Los grupos son horizontales y hay comunicación y mejora continua. Son trabajos que salen de las líneas tradicionales”.

 Subsidio a la formación

Francisco consideró que este es un camino que se tiene que tornar prioritario para los gobiernos de todos los niveles y para los referentes del mundo educativo. “Nos gustaría que quienes toman decisiones le presten más atención a este rubro, que tiene tanto potencial... Se crean puestos de trabajo remunerados y el dinero vuelve de manera directa o indirecta en forma de impuestos y en consumo”, expresó.

Consideró que los gobiernos podrían acompañar desde lo económico, subsidiando la formación de jóvenes para que se desempeñen en estas áreas. Mencionó que en este tipo de industrias es conveniente que a esta tarea la lleve adelante el sector privado: “Las empresas saben lo que necesitan aprender los chicos y cómo... Se forma en la parte práctica, más allá de la formación teórica, y mucho se aprende junto con los compañeros”.

El experto reconoció que las empresas que trabajan en el rubro del software y la tecnología crecerían más si hubiera más capital: “Esto se hace 100 por ciento con fondos propios y con reinversión”.