El Albo ganó bien y comparte la punta del torneo

La jornada del sábado le salió “redondita” a Gimnasia y Tiro, por la victoria que logró en el clásico frente a Central Norte, por 1 a 0, con un gol de cabeza que convirtió Alfredo González Bordón, resultado que le dio el impulso de compartir la cima de la tabla de posiciones de la zona B del torneo Federal A, con la derrota de Racing de Córdoba frente a Boca Unidos por 2 a 1, en Corrientes.

Es que el albo ganó un duro compromiso, obtuvo un triunfo importante por el envión que traía el cuervo y ahora quedó cabeza a cabeza con los cordobeses, en la pelea por el liderazgo del grupo hasta al final del primer tramo de la competencia, cuyo ganador pasará a disputar el primer ascenso de categoría. Pero aún restan varias fechas por delante y con 36 puntos en juego. Claro que para Gimnasia y Tiro sumar de a tres ante un adversario que también se propuso alcanzar los primeros lugares le significó fortalecerse para los dos próximos partidos que deberá cumplir, primeramente con Chaco For Ever, de visitante y el domingo venidero estará frente a frente, con el otro puntero, Racing de Córdoba.

A todo esto el partido en el Gigante del Norte durante los primeros minutos mostró a un Central Norte dispuesto a imponer presencia. Con esa actitud y con un Sacha Magna moviéndose en forma permanente con su mejor perfil dio la sensación de que la cancha se inclinaba para el lado de Luciano Silva, incluso hubo dos tiros de esquina a favor de los dirigidos por Ezequiel Medrán, pero que no trajeron peligro.

La marca escalonada al Sacha Magno por parte de la defensa contraria empezó a funcionar a pleno. Enfrente Juan Perillo también preocupaba a los centrales que lo marcaban y el partido modificó su curso, porque con esa presión de jugar con los dientes apretados, Gimnasia sacó una mejor tajada, incluso hasta para inquietar al “Rulo” Mauricio Pegini. Así, Nicolás Capellino, ante una habilitación de Matías Birge, se encontró frente al arquero cuervo pero su remate se estrelló en el horizontal y se fue al córner; en otra jugada Perillo definió al gol, pero el línea marco posición adelantada. Central Norte pudo salir del encierro y avisó a través de Franco Faría, pero el remate fue despejado por Silva. 

A Gimnasia le sentaba mejor recorrer el campo contrario, aunque en la segunda parte del juego, Germán Lesman consiguió asociarse más con el juego para aproximarse hasta la valla contraria. 

El trámite presagiaba que aquel que podía marcar el gol ganaba el clásico. Y Gimnasia y Tiro, con una ejecución de Rubén Villarreal, de un tiro libre, Guido Milán cambió la trayectoria para que Alfredo González, en la puerta del arco, estableciera el 1 a 0, lo que en definitiva sirvió como bienestar de todo el pueblo millonario.